Cristina Urgel: "La reina del sur puso las expectativas muy altas, pero no basta con hacer una serie de éxito para mantenerte en la profesión"
En 2010 Cristina Urgel recibió una llamada de teléfono que, sin saberlo, cambiaría su vida. El que le hablaba era su representante para informarle de un casting en el que buscaban a una actriz con su perfil para formar parte de un ambicioso proyecto a nivel internacional que en ese momento se estaba cocinando: La reina del sur. “Rápidamente me compré el libro porque no me lo había leído y según lo leí me enamoré de Paty”, rememora hoy la actriz de 39 años desde su natal España en entrevista para People en Español. Fue un flechazo a primera vista. “Y es que me enamoré del personaje, es de esas pruebas que haces con muchísimo entusiasmo y diciendo ‘este personaje tiene que ser para mí' y así llegó Paty a mi vida”, asegura la guapa española que con su impecable interpretación de La teniente O`Farrel logró que su personaje se convirtiera en uno de los más queridos de la telenovela. “La verdad no me esperaba el éxito que tuvo la serie”, se sincera. “Me hizo muchísima ilusión porque era un personaje de esos que cuando estudias teatro quieres hacer, totalmente alejado de ti y que tenía todos los ingredientes: cocainómana, lesbiana, narcotraficante… Me hacía muchísima ilusión, pero para nada me imaginaba el éxito. Sabía que era una historia buena, pero no que 8 años después seguiríamos hablando de ello. Me parece increíble”, expresa Urgel.
Ilusión, pero también mucho vértigo fue lo que sintió la actriz al adentrarse por primera vez en la piel de un personaje tan controversial y demandante como lo fue Paty. “Al principio daba un poco de vértigo porque claro había que hacerlo muy bien para que no resultase antipático porque de entrada era la típica niña rica acostumbrada a hacer lo que le daba la gana y podía resultar antipática, pero claro luego tenía una vida interior y una profundidad”, reconoce. Precisamente ahí radicaba su reto como actriz. “Al principio teníamos ese miedo de que la gente no empatizara con ella, pero creo que lo logramos y conseguimos que se viera el fondo de Paty. Al final era un poco una muñeca rota por las circunstancias de su vida y el sufrimiento que lleva el amor imposible”.
A veces nos reíamos con los otros actores porque no nos explicábamos que después de haber hecho [La reina del sur] no tuviéramos trabajo porque ha habido una época en la que literalmente [no teníamos]”
Grabar la ficción en un país que no era el suyo supuso una experiencia ‘muy enriquecedora' para Urgel, pero también un tanto ‘dura'. “Con el tiempo te quedas con lo bueno, pero fue duro porque de entrada grabamos en otro país que no era el nuestro, todo era en exteriores y el clima de Bogotá, Colombia, era complicado”, explica. Precisamente el estar trabajando fuera de España hizo que la actriz formara una gran familia con todos su compañeros de la serie. “La mayoría del casting era español, entonces fue casi como un Big Brother o un Gran Hermano, todos vivíamos en unos apartamentos en Bogotá y alejados de nuestra familia, nuestros amigos. Al final nos hicimos muy piña y fue como muy intenso porque no solo ibas al rodaje sino luego después cenabas con tus compañeros y llegaba, por ejemplo, un sábado por la noche y decías ‘¿qué hacemos? pues bueno tendremos que salir todos a comer'. Fue muy divertido la verdad”.
No tan divertida, sin embargo, fue la experiencia que vivió la actriz durante las grabaciones de unas escenas de la serie en Marbella, España, en la que la actriz llegó incluso a temer por su vida. “Recuerdo que estábamos Kate del Castillo [Teresa], Alberto Jiménez [Oleg] y yo en una lancha que tenía que conducir Kate mientras nos perseguía un helicóptero a muy pocos metros sobre nosotros. Yo si estiraba la mano podía tocarlo. Entonces entramos en pánico. Kate solo aceleraba y yo le decía ‘estás loca, frena'. Además como soy muy delgadita iba como casi volando y yo veía al final Puerto Banús y decía ‘vamos a acabar ahí estrellados, hoy es mi último día' y el helicóptero pegado a nosotros como si de verdad nos estuviera persiguiendo. Fue una locura”, cuenta hoy entre risas la actriz.
A veces suena muchas veces el teléfono y a veces deja de sonar y de verdad que no he tenido tantas ofertas como os imagináis para nada, por desgracia porque el trabajo es necesario
Otra de las escenas que recuerda especialmente la actriz, aunque por un motivo muy diferente, es la muerte de su personaje. “La grabamos sin estar programada porque todavía estábamos rodando en Girardot, un pueblecito de Colombia donde estaban las casas donde vivían Paty y Teresa de millonarias. Pero de repente en una de las casas había un baño muy espectacular y muy apropiado para rodar esa escena. Y me acuerdo que una tarde el director nos dijo ‘no está programado pero mirad el baño, creo que quiero rodarla aquí'. Yo me quedé así como de ‘si no me he preparado todo esto que es como lo más fuerte', pero era la tina perfecta. Me acuerdo que esa noche estaba histérica. Mientras estudiaba esas escenas yo ya lloraba y en los ensayos al día siguiente también lloraba y me decía el director ‘no llores, no te desgastes', pero no podía evitarlo. Era tan bonito lo que estaba escrito que no necesitaba que dijeran acción para emocionarme. Las lágrimas caigan solas. Fue especialmente emotivo de rodar”, recuerda con cierta nostalgia.
Si bien la experiencia no pudo ser más enriquecedora, lo que vino después del éxito que tuvo la serie no fue, sin embargo, tan bonito como la actriz esperaba.
“La reina del sur puso las exceptivas muy altas, cuando haces una serie con un personaje tan potente y tiene tanto éxito luego te cambia un poco la perspectiva de todo, tienes un momento de subidón, de que surgen cosas de trabajo y tal, pero luego llega el bajón de que no todo es tan fácil”, se sincera. “No basta con hacer una serie de éxito para mantenerte en esta profesión, entonces es una mezcla extraña porque es un profesión muy dura, muy gratificante por un lado, pero muy dura en el día a día y entonces tienes esos subidones anímicos y luego de repente estás por los suelos deprimido porque no suena el teléfono y es complicado, pero sí te da la lección de que no puedes bajar la guardia, de que no todo está hecho por tener un éxito”, reconoce Urgel.
“A veces nos reíamos con los otros actores porque no nos explicábamos que después de haber hecho eso no tuviéramos trabajo porque ha habido una época en la que literalmente [no teníamos]”, agrega.
Y es que, contrario a lo que muchos podrían pensar, las ofertas de trabajo lamentablemente no llovieron para la actriz después de La reina del sur.
“Estuve a punto de hacer una cosa con Televisa y en plenas negociaciones surgieron desavenencias y problemas y al final no salió y luego de verdad que lo he intentado y no ha sido por mí, pero a veces suena muchas veces el teléfono y a veces deja de sonar y de verdad que no he tenido tantas ofertas como os imagináis para nada, por desgracia porque el trabajo es necesario”, reconoce Urgel, quien está más que dispuesta a volver a trabajar en Latinoamérica.
“Yo estoy deseando trabajar, aquí en España, fuera de España, lo que quiero es trabajar porque te prometo que no me sobra para nada el trabajo por desgracia”, lamenta Urgel.
Mientras espera ese ‘gran proyecto' que le permita regresar a la televisión, la actriz se desvive por atender a su hija pequeña mientras su mente no deja de maquinar proyectos.
“Tuve una niña hace tres años y bueno sigo trabajando en lo que puedo, en lo que me llamen, haciendo pruebas, cuidando de mi hija y escribiendo mucho porque como el trabajo escasea también escribo e intento sacar mis proyectos adelante”, cuenta.